Pero, ¿funcionará, doctor?
Cuando estamos enfermos deseamos el mejor tratamiento disponible. ¿Pero cómo podemos saber si un tratamiento funciona? Los ensayos clínicos aleatorios son la mejor manera de probar si un tratamiento es efectivo y mejor que otros tratamientos o ningún tratamiento.
Procedimiento para probar un tratamiento nuevo
- Consiga gente que esté enferma.
- Dele a la mitad el nuevo tratamiento que se está probando.
- A la otra mitad dele el tratamiento estándar (o un tratamiento ficticio, placebo, si no hay un tratamiento estándar).
- Use la suerte para decidir quién recibirá el tratamiento nuevo o el estándar, esto se llama asignación aleatoria.
- Compare cuántos mejoraron, o sufrieron efectos adversos, en cada grupo para ver cuál tratamiento fue el mejor. ¿Por qué la gente en un ensayo clínico aleatorio no puede elegir cuál tratamiento tener?
Si la gente que obtiene el nuevo tratamiento es diferente de la que obtiene el tratamiento estándar o ficticio, no se puede concluir con confianza que el tratamiento sea mejor o peor. ¿Por qué? Porque las diferencias en los resultados simplemente podrían deberse a diferencias preexistentes entre los grupos. La mejor manera de conseguir grupos similares es usar la suerte para decidir cuál tratamiento recibe una persona, por ejemplo, arrojar una moneda al aire, por sorteo, o usar un programa de computadora para dirigir la distribución aleatoria.
Tampoco quiere que alguien piense “Yo recibí el mejor tratamiento” o “Yo recibí el peor tratamiento” ¡porque esto realmente puede influenciar si mejoran o no! Entonces, la gente no debería saber cuál tratamiento está recibiendo; esto se llama “enmascaramiento”. Además, es mejor que usted tampoco sepa qué tratamiento está recibiendo cada paciente; esto es el estudio ciego para los prestadores de cuidados de salud, asesores e investigadores, ya que esto también puede influenciar los hallazgos.
Recuerde, no puede estar seguro de cuál tratamiento es mejor hasta obtener los resultados de los ensayos clínicos aleatorios; los ensayos se realizan para resolver la incertidumbre acerca de cuál tratamiento es mejor en realidad. Con frecuencia, se necesita más de un ensayo para decidir realmente.
Probablemente no vaya a tener la oportunidad de dirigir su propio ensayo, pero quizá le pidan que participe en un ensayo como paciente. Antes de aceptar, es importante que entienda cómo funcionan los ensayos clínicos aleatorios, y el diseño y objetivo del ensayo al que lo están invitando a unirse, así como los posibles beneficios y riesgos.